Durante el foro “Impacto de la seguridad en los diferentes modos de transporte” organizado por la Comisión de Seguridad y Prevención del Delito de la Confederación de Cámaras Industriales (CONCAMIN), la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (CANACAR) dio a conocer el estudio denominado “Agenda Estratégica ante el impacto de la inseguridad en el sector del autotransporte de carga”.
En dicho estudio se detalla que el robo al autotransporte de carga se disparó de 5 mil 435 delitos en 2015 hasta 10 mil 230 robos en 2017, que se traduce en un crecimiento del 88 por ciento en dos años. Tan sólo en el último año, entre costos directos e indirectos, el costo del hurto al sector ascendió a 92 mil 500 millones de pesos, que representa 0.5 del PIB.
Como costos directos de identifican aquellos que absorbe el transportista, como equipamiento preventivo, seguros, trámites y diligencias para recuperar unidades, deducibles, ingresos que deja de percibir, entre otros, los cuales alcanzan los 82 mil 600 millones de pesos. La repercusión de estos costos en el sector transportista, sin contabilizar los costos por parte del estado, significan el 7 por ciento del PIB del sector del autotransporte de carga, lo que representa una caída del 0.3 por ciento del PIB nacional, “un dato que no es nada trivial”.
Los costos indirectos cuantifican el impacto económico de la inseguridad en otras ramas y sectores, como resultado del encadenamiento productivo existente con el resto de la economía. Estos alcanzan un total de 9 mil 800 millones de pesos.
Asimismo, se reveló que los estados de Puebla, Michoacán, Estado de México y Tlaxcala concentran alrededor del 75 por ciento de los delitos a este sector, según el estudio. (Redacción AT2000)
