Durante el último año, la demora para obtener permisos para instalar nuevas gasolinerías ha impactado la cadena de proveeduría. En 2020, la Comisión Reguladora de Energía (CRE) únicamente otorgó 175 permisos, mientras que para el primer trimestre de este año apenas ha entregado 67.
En contraste, durante 2016, 2017 y 2018 el órgano regulador autorizó 679, 351 y 416 permisos, de manera respectiva, de acuerdo con datos de la Asociación Mexicana de Proveedores de Estaciones de Servicio (AMPES).
“Para 2020, por diversos factores como la pandemia y la falta de quórum en la CRE, entre otros problemas que se han presentado, sólo se generaron 175 permisos; en este año, hasta el 30 de marzo, se tienen únicamente 67 permisos autorizados. Lamentablemente los permisos se encuentran un poco detenidos y eso nos genera un golpe fuerte a la proveeduría”, manifestó Andrés Gutiérrez, Presidente de la AMPES.
De acuerdo con información publicada por el diario reforma en enero pasado, la CRE tenía detenidos alrededor de 400 permisos para nuevas estaciones de servicio, con base en datos de Onexpo Nacional. Asimismo, los pocos permisos entregados eran para dar preferencia a la marca Pemex.
Gutiérrez explicó que México tiene un gran potencial de crecimiento y una oportunidad de negocio con la instalación de más estaciones de servicio porque se tiene una demanda creciente. El directivo expuso que, en el territorio nacional, hay una gasolinera por cada 10 mil 27 habitantes, en comparación con otros países como Estados Unidos, donde la proporción es por 2 mil 677 habitantes.
“La demanda de estaciones de servicio sigue creciendo, sobre todo en municipios que están alejados de zonas conurbadas donde la venta quizá no es muy elevada, pero no se tiene ni una sola gasolinería para satisfacer la necesidad”, puntualizó el dirigente de la AMPES. (Redacción Autotransporte)
