Prácticas recomendadas para la sanitización de cabinas durante la pandemia

Ante la importancia del autotransporte como actividad esencial durante la actual pandemia de COVID-19, debido a que mueve más del 80 % de las mercancías y productos básicos en México, el Consejo de Mantenimiento y Tecnología (CMT) llevó a cabo el webinar “Sanitización y desinfección de cabinas de camión”, impartido por Fermín Luis Torres, Gerente General de Keego Soluciones en Mantenimiento.

La sanitización se realiza con base en la Práctica Recomendada 443 del TMC de Estados Unidos, la cual ofrece una guía de limpieza y desodorización de cabinas de vehículos, y además, motiva al transportista a realizar un programa en la materia, asegurándose de que las unidades estén limpias cada vez que vayan a realizar un viaje; incluso, se puede recurrir a esta práctica para hacer el aseo de las áreas de carga.

La importancia de esta práctica radica en salvaguardar la salud de los operadores, quienes están en contacto constante con personas u objetos que pudieran estar infectados. Asimismo, porque es responsabilidad de todos contribuir a la reducción de contagios por COVID-19.

Las superficies como el tablero de instrumentos deberán limpiarse para evitar manchas .

Procedimiento

El procedimiento se divide en dos y durante su realización se van a generar vapores de gas de ClO2 o dióxido de cloro. Este gas es un poco agresivo para los ojos, la nariz, e incluso la piel, que se puede irritar, por lo que se recomienda alejar a personas, plantas y mascotas de la zona a tratar, la cual deberá mantenerse ventilada. También es importante aplicar procedimientos de bloqueo/señalización para limitar el acceso a la cabina y al camarote sólo a personal autorizado.

Los materiales requeridos para este proceso son los siguientes: un recipiente o contenedor de polietileno de alta densidad  para preparar la solución RTU (Ready-To-Use); una etiqueta de agarre firme para identificar el contenedor de la solución; tiras reactivas; un atomizador; equipo de seguridad como lentes, guantes de hule y respirador, si la ventilación es inadecuada; y pastillas o cloro líquido, de acuerdo a la cantidad a preparar.

Preparación de la solución RTU

Primero debe seleccionarse el tamaño de contenedor correcto para la tableta dióxido de cloro que se está utilizando: a una tableta de 20 g corresponde 1 galón (3.8 litros) de agua para solución de 500 ppm; una tableta de 100 g en 5 galones (19 litros) de agua para solución de 500 ppm; 15 mililitros de cloro de uso doméstico (en concentraciones entre 4 y 6 %) por cada litro de agua para una solución de 750 ppm.

Tras llenar hasta el límite el contenedor con agua, se deposita la tableta en el contenedor, que tardará entre dos y tres minutos para disolverse. En caso de usar cloro líquido, debe verterse en el depósito y agitarlo unos segundos para que se mezcle la solución. Es importante colocarle una etiqueta con los siguientes datos para su identificación: nombre de la solución, concentración (ppm) y fecha de preparación.

Las vestiduras de la unidad tardarán alrededor de una hora en secarse.

Sanitización y desinfección de las unidades

Primero hay que eliminar el exceso de suciedad antes del tratamiento; enseguida, se llena el atomizador con la solución RTU y se rocía ligeramente todas las superficies de techo a piso. No es necesario que escurra el líquido; con que humedezca, el resto se llevará a cabo por la vaporización de la solución.

Esta acción debe durar por lo menos cinco minutos. Las superficies lisas como el tablero de instrumentos deberán limpiarse para evitar manchas por solidificación. El vehículo debe mantenerse ventilado para que las superficies se sequen; las superficies sólidas tardan entre 5 y 15 minutos, mientras que las vestiduras necesitarán de 30 minutos a una hora. Luego de esto, el vehículo puede regresar al servicio.

Recomendaciones generales

Se recomienda usar el atomizador porque así es más rápida la aplicación de la solución; quizá con un trapo se utilice una menor cantidad de producto, pero lleva más tiempo hacerlo y es menos efectivo, ya que hay superficies que no quedan totalmente limpias o no se alcanzar a limpiar tan rápido como con el atomizador.

El tiempo de vida de la solución es de 3 a 6 meses, siempre y cuando esté en un recipiente cerrado, en un lugar seco, lejos de la luz solar y temperaturas extremas. Sin embargo, es importante contar con las tiras reactivas para determinar su fuerza y eficacia.

En promedio, las rutas de autotransporte en México tardan de uno a dos días; por tal motivo, cada vez que el vehículo regrese a la base, debe ser sanitizado. Un litro de la solución puede alcanzar hasta para seis camiones, incluyendo cabina y camarote. (Rafael Cervantes Flores)

La limpieza de remolques y equipo aliado también es importante.

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